Sólo vengo a contarles un pequeño relato.
Ayer por la tarde, mientras caminábamos de vuelta a casa, me llamó la atención una rosa tirada. Era una rosa pequeña, muy muy roja. Muy bella.
Una brevísima rosa que me hizo pensar en la literatura, en cómo la lectura literaria moldea la mirada. Donde había una rosa se manifestaba para mí el sacrificio vital de un ruiseñor.
Un pequeño capullo tirado (del cual otro tal vez ni se hubiera percatado, como me dijo Diego después), me llevó de repente y sin quererlo a un rincón de la infancia: ese en el que todavía me espera Oscar Wilde para conmoverme nuevamente y, 20 años después, arrancarme una lágrima.
martes, junio 07, 2011
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10 comentarios:
mira si no tendras razón, que de solo leer lo que contas me pongo a llorar... hay cosas que te marcan para siempre, y nuestra herencia cultural es algo de lo que estoy muy pero muy agradecida... besos enormes
Yep, yo ni la ví.
¡Gracias a las dos por compartir estas vivencias y valorar lo recibido!
Las abrazo y beso entrañablemente!
mamá
Para el que quiera leerlo o releerlo, aquí está_
http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/wilde/ruisenor.htm
http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/wilde/ruisenor.htm
ing/wilde/ruisenor.htm
hola!!!cómo van?
ese libro me lo regaló una chica cuando cumplí 8 años y se lo leí a manu bastante pero la verdad es que son medio tétricos los cuentos,como el que le contaba maría sara cuando era chiquitito se acuerdan?dojo,dojo...
el que no nos cansamos de leer es el gigante egoísta que tieneotro final,jajaja.
y si..todo un sacrificio por una causa que nunca llegó a concretarse.. es super lindo tener esta clase de vivencias, porque uno se siente vivo y feliz con tan poquita cosa como un cuento convertido en recuerdo de infancia...convertido en familia y alegría...es mágico...la memoria y los recuerdos seleccionados de alguna manera desconocida son maravillosos...
que sepas que es compartido.
un beso!
y un abrazo a los progenitores que nos hicieron familia!
igual el que mas me gusta es el principe feliz...
¡Gracias Manita!
Besos y abrazos
mamá
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